Capítulo 3

QHUINN

Habían pasado varios días desde que conocí a Blaylock… y simplemente cada día necesito más de él. Después de aquella larga noche y mañana en que nos amamos mutuamente, algo se había roto dentro de mí, era como que mi sistema lo necesitaba, sin embargo me negaba a aquello. A pesar de que intercambiamos nuestros números de teléfonos, me había reusado a llamarlo… ¿Qué mierda le iba a decir?... ¿pensaría que soy un jodido acosador? Lo más probable, me repetía una y otra vez para tratar de convencerme…

Aquel día sábado me había decidido, me fugué de todo y de todos, cancelé cualquier compromiso con tal de tener un momento de reflexión, y me fui a mi lugar especial a pensar, necesitaba de este sitio cada vez que algo me acongojaba o atormentaba, un lugar que nadie sabía que tenía un significado especial para mí, un lugar muy tranquilo y poco concurrido por la gente, olvidado diría yo. Me levanté temprano, era una mañana fría. Así que cargando como siempre una mochila pequeña me largue al Patio de Disidentes del Cementerio General.

El lugar estaba vacío, como siempre. Era un patio cerrado ubicado dentro del mismo recinto con tumbas muy antiguas, pero muy bien cuidadas, altos murallones y una gran reja de entrada, comencé a pasearme distraídamente. Sé que muchos no comprenderían el significado que tiene para mí, pero encuentro tanta paz en aquel sitio, por eso guardo este secreto celosamente… después de todo, es un lugar seguro… todos están muertos.

En mi mente solo tengo a aquel pelirrojo de divertidos ojos azules, sonrío como idiota de solo pensar en él y todo lo que hicimos… Me pasan cosas… y me asusta, se tan poco de él y sin embargo se ha metido bajo mi piel… no quiero ponerle nombre a lo que me pasa, me aterra.

No sé cuánto tiempo vague una y otra vez por los estrechos corredores, entre tumbas, cruces y esculturas, tenía el móvil aferrado a mi mano, con una gran disyuntiva entre llamarlo o no… al final solo envié un mensaje

- SMS: Hola Blay! Ammm… soy Qhuinn ¿te acuerdas de mí?... me preguntaba si  te gustaría reunirte conmigo. Espero tu respuesta…  Q

Miré el mensaje y lo leí muchas veces, cerrando mis ojos y reuniendo valentía de no sé dónde… presioné enviar.

BLAY

7 días, 168 horas y 10.080 minutos. El tiempo que había trascurrido sin volver a saber de Qhuinn. Desde aquel magnifico sábado, tiemblo solo de pensar en la noche y el día. Un maratón de sexo puro y duro. Pero en estos días, no sé que me pasaba tenia vació, añoranza, deseo por saber de él. Salía a trabajar todos los putos días, por la tarde iba al gimnasio a entrenar para después volver a casa. La misma rutina un día y otro. Pero en todos estos días el móvil no lo soltaba. Al día siguiente de nuestra despedida, pensé en llamarle, pero que decirle...

- “hola… ¿te gustaría salir a tomarte algo?” - uff... penoso –

Me gustaba y mucho eso seguro. Sonreía como un tonto, muchas veces al día, en el trabajo con los amigos, me preguntaban:

- ¿y esa risa Blay? ¿Te has acordado de algún chiste?

 Asentía con la cabeza, si un chiste pensaba… si supierais en quien pienso… fliparíais.

Sábado… en la cama acostado, planteándome que haría. Me levante con ganas de irme un rato a la playa, me llevaría a mis perros. Si eso haría .Me prepare lo más cómodo posible, o sea a la mierda el puto traje de todos los días. Ropa deportiva. Cogí las llaves y por supuesto el móvil. Los perros casi me arrastraban hacia el lugar.

Nada más llegar, empezaron a correr por la playa, metiéndose en el agua, revolcándose en la arena y yo, detrás de ellos corriendo a la par, se sacudían los muy condenados poniéndome chorreando de agua. Pero en el fondo disfrutaba de esos momentos, después de pasar largo rato jugando con ellos me senté en la blanca arena de la playa, dispuesto a llamarle no pasaría un día más sin saber de él. Marque... pero el móvil en ese momento vibro... mensaje...

SMS: Hola Blay! Ammm… soy Qhuinn ¿te acuerdas de mí?... me preguntaba si te gustaría reunirte conmigo. Espero tu respuesta… Q

-¡¡Dios!! siiiiii.

Grite a pleno pulmón... me reí a carcajadas, hasta parecía que estábamos conectados.

SMS: hola Qhuinn… me acuerdo muy bien de ti… de echo he pensado en ti... ¿te parece dentro de un par de horas en la taberna de Sebas?...B.

Apreté el botón de enviar...

QHUINN

Sentado sobre el frío mármol negro de una tumba, tamborileaba nerviosamente los dedos sobre mi rodilla, mirando fijamente el móvil… 3 minutos y 24 segundos pasaron cuando recibí el mensaje. De inmediato lo leí y sonreí como idiota, pero me golpee mentalmente para volver a la realidad. Una Taberna implicaba gente, gente implicaba poca privacidad y poca privacidad significaba que no podría decir de manera libre todo algunas cosas, porque hay que ser sincero… Esto que me sucede no se encuentra dentro de la norma establecida y autoimpuesta para mí. Después de algunas experiencias poco afortunadas, simplemente tomaba lo que se me ofrecía, sin la creación de lazos afectivos, solo para pasar un rato agradable y evitarme posibles dificultades. Pero desde algún tiempo hasta ahora había dejado de ser atractivo y satisfactorio, dedicándome sólo a llevar una vida moderadamente tranquila, con mucho trabajo, poco tiempo y casi sin vida social… hasta la noche del sábado en que ese pelirrojo simplemente me… no pensaré en eso, no es sano para mi salud mental, sin embargo necesitaba verlo. Cojo el móvil y escribo.

- SMS: ¿podrías venir al lugar en que me encuentro? Te prometo que es un lugar tranquilo y nadie nos molestará. Q

Envío el mensaje con un archivo adjunto con el mapa de ubicación.

Saco un cigarrillo y comienzo a fumar mientras intento despejar mi mente y aclarar ideas…

- ¿Qué le diré? ¿si lo toma a mal? ¿y si estoy…? No pensaré en eso… lo haré después, ahora no

Me paseo nerviosamente de un lugar a otro con el movil en la mano mientras espero su respuesta

BLAY

Todavía esta alucinado con el mensaje de él. Sentado en la arena, quería levantarme pero me encontraba pegado. Si… me encontraba feliz y con las jodidas mariposas en el estomago. Llame a mis perros, quería llegar a casa rápido y prepararme a conciencia. Solo unos minutos y el móvil volvió a vibrar...

- SMS: ¿podrías venir al lugar en que me encuentro? Te prometo que es un lugar tranquilo y nadie nos molestará. Q

Mierda... se habrá arrepentido… quera decirme algo... ¿que no me iría a gustar?... segundos después, otro SMS con un mapa e indicaciones. Necesitaba verlo... SI O SI... 

-SMS: De acuerdo estaré ahí en media hora. B.

Me dispuse a salir, después de una apresurada ducha y de vestirme de manera informal. Tarde unos 15 minutos en llegar al lugar. Pare la moto sorprendido. Un cementerio. Me apee de ella y me adentre en el siniestro lugar. Tumbas y cruces y flores. Mierda, me abría equivocado de sitio, volví a mirar el SMS con las señas. No este era el lugar. Me precipite un poco más adelante y distinguí un parque. Te vi dando vueltas de un sitio a otro.

-¡Qhuinn! - te llame -

QHUINN

Caminaba y caminaba por  los estrechos pasillos una y otra vez, tenía mi móvil firmemente aferrado en mi mano e inevitablemente observaba la hora a cada momento.

Mi corazón se detuvo por una fracción de segundo para luego tomar un acelerado ritmo cuando sentí su voz llamándome, al girarme lo vi, se encontraba justo en la entrada del Patio de Disidentes, el mundo desapareció a penas clave los ojos en él quedé paralizado, sin embargo me golpee mentalmente y apresuré mi andar en su dirección bordeando las tumbas, acelere mis pasos llegué hasta su lado e hice el amago de abrazarlo, me contuve… cerré en puños mis manos y di un paso atrás… debo tomarme esto con calma, un paso en falso y se iría todo a la mierda, sonreí.

- Espero que no te hayas espantado por el lugar. Pero es mi lugar favorito para arrancar de todo y de todos.

Todo se sentía tan irreal tenerlo aquí, me pican las manos por tocarlo, abrazarlo, besarlo suavemente, sentir en mi lengua su delicioso sabor. Pero nadie me asegura que esto sea recíproco.

BLAY

 Metí las manos en los bolsillos de los jeans. Mejor así, porque estaba jodidamente atractivo. Observe como a mi llamada, acelero el paso para venir hasta mí. Mi polla salto entre mis pantalones. Mierda, pero es cada vez que lo veía, se me venía la palabra sexo a la cabeza.

- Espero que no te hayas espantado por el lugar. Pero es mi lugar favorito para arrancar de todo y de todos.

Lo mire ingenuamente con una sonrisa dibujada en mi rostro.

- tengo que confesar, que cuando llegue aquí... pensé que me había equivocado... Un lugar extraño, para vernos… la verdad.

Contemple como apretaba sus puños a ambos lados de las caderas, se sentía nervioso. Le hice una radiografía con mi mirada. Cada gesto, cada palabra, como me gustaba este hombre… Dios.

Los pies se movieron, hasta llegar a unos bancos, cerca de una fuente. Me senté, estirando las piernas, cruce mis brazos en mi pecho y solté lo primero que se me vino a la cabeza.

-Pensé en llamarte varias veces Qhuinn... No se para quedar a tomarnos algo en algún sitio, poder hablar un rato.-agache la cabeza.- Me gustas, y desde hace una semana, no he dejado de pensar en nuestro encuentro, quizás pienses que estoy un poco loco, pero es la verdad..

QHUINN

Sentirlo tan cerca, era una tentación, mis deseos de tocarlos son altos, mis manos estorban y comienzo a juguetear con el cierre de la mochila que se encuentra a  mis pies, lo miro fijamente cuando me declara que… ¿le gusto?... le gusto… ¡jodido infierno le gusto!

Boqueo, estoy casi en shock…

- pues… ¡wow! Ammm… no esperaba que esto nos pasara… esto no me había sucedido nunca ¿sabes? Yo no soy así… nunca había sentido la necesidad tan apremiante de saber de alguien… pensé en llamarte un montón de veces, muchas diría yo, pero me negué a hacerlo… desde aquel día que estuvimos juntos no sé… me siento distinto… no puedo sacarte de mi cabeza, es como si te hubieses metido bajo mi piel

Saco un cigarrillo y lo enciendo

- todo se ha dado de manera distinta contigo, partiendo con que yo no acostumbro a irme a la casa de alguien que acabo de conocer, por regla general voy a moteles, nunca me quedo a pasar la noche, siempre son relaciones pasajeras y superficiales, jamás llamo dos veces a alguien, procuro no crear vínculos… eso sin contar con que llevo como dos meses sin tener relaciones sexuales. Pero contigo…. Tú rompiste todos los esquemas que he establecido…

Miro fijamente el humo del cigarro

BLAY

Oigo cada una de sus palabras, sinceras. Me inclino y cojo su cigarro acariciando su pulgar. Lo llevo a mis labios y doy una gran calada. Exhalo el humo en pequeños círculos. Le vuelvo a colocar el cigarro entre sus dedos.

Después de varios minutos, reflexionando de cada palabra que me ha dicho. Estaba claro que los dos teníamos química y algo más. Observe como tintineaba el pitillo, una y otra vez.

-Ya que estamos de confesiones. "sonreí"… me toca el turno. Cierto que desde el día que saliste de mi casa, he pensado en ti, hasta me vienen imágenes tuyas y me rió como un tonto. Tengo muchos amigos e incluso he tenido parejas estables. Llevo un par de meses sin estar íntimamente con alguien, no porque me falten, con esto no quiero parecer engreído, pero cuando he querido o deseado a alguien nunca me han dado problemas... Sin embargo me canse de los polvos de una noche.

Lo mire, esperando alguna reacción a mis palabras, sin quererlo se me fue la mano a su coleta, soltando el elástico que sujetaba su melena, levanto su mirada, acaricio la mano que tenia entre su cabello. Deslice mis labios hasta los suyos, besándolos.

-¡¡Oh!! Lo siento... Pero me gustas mucho, no sé explicarlo simplemente, quiero conocerte. Además de todo eso, siento una atracción sexual por ti que no es normal.

Me levante del banco, quedando enfrente de él. Su cabeza se encontraba agazapada entre los hombros, la mirada perdida.

-Quizás mis palabras sean fuertes ya que nos conocemos de un día, pero ante todo quiero dejar claro lo que estoy sintiendo... y estas entrando en mi corazón... haciéndote un hueco.

QHUINN

¡Querido  Jesucristo! Reprimí a pura fuerza de voluntad un gemido al sentir el suave deslizar de sus labios en los míos, fue un beso suave… tímido diría yo, mi cuerpo reacciono de forma inmediata a su cercanía, mi corazón se disparó. Demasiado pronto se alejó de mí, sentí su ausencia de inmediato, quedé congelado y un tanto confundido.

Observo que te levantas quedando frente a mí, te observo anonadado, no doy crédito a tus palabras, en una fracción de segundo mi mente se llena de preguntas

- ¿será posible? ¿Podré dar crédito a esto? ¿Será real? no buscaba esto, no lo quería, arrancaba de hecho… pero ahora….

Apagué el ya consumido cigarrillo, recogí la colilla y la coloque entre los cordones de mis deportivas y lo mire fijamente, directo a sus ojos y me perdí en ellos, Dios expresaban tanto de él, de lo que sentía… definitivamente está tan sorprendido como yo, ha sido inesperado para ambos. Ver que esa expresión en él, es solo el vivo reflejo de lo que siento internamente, es como si fuese un espejo de mis propios sentimientos… no deseo ponerle nombre a lo que me pasa, me espanta de solo imaginarlo después de lo que he pasado. Sin embargo, siento desde el fondo de mi alma que ya es tarde para dar un pié a tras.

- ammm… pues… no son fuertes tus palabras Blay, te encuentro la razón. Siento la necesidad apremiante de que me conozcas y de conocerte. Después de… - carraspeo y sonrió al recordar – esa larga jornada que tuvimos nos pasaron muchas cosas…. Y en lo personal tengo sentimientos que no entiendo y no quiero catalogar… por lo mismo vine a este sitio B… a pensar en ello y por lo mismo te escribí, necesitaba decírtelo en persona… me gustas y mucho, es algo que no puedo negar, has estado en mi mente desde ese domingo que nos despedimos, siempre presente en cada cosa que hago.

BLAY

 Dos pasos y me incline sobre él. Pase mi dedo pulgar por la comisura de la boca, acerque mis labios y lo volví a besar. Entreabrí mis labios sacando la punta de la lengua, bordeo su comisura, pase por entre sus labios. Joder... no podía evitar tocarlo, ahora que lo tenía tan cerca. Me rodeo el cuello inclinándome más sobre sus labios, apresando mi boca .Nos besamos con pasión, casi con una necesidad imperiosa fuera de lo normal. Termine dándole pequeños besos.

-Tengo que reconocer que esto me ha sorprendido, quizás por eso no te llame, porque por muchas vueltas que le he dado a mi cabeza, no lograba comprender como era posible esta necesidad de verte - Tome aire- Nunca había creído en los flechazos, ya que jamás me paso nada de eso, pero contigo desde que te vi en el pub, y el día que pasamos juntos. No, has salido de mi cabeza. 

Sus ojos me miraban, brillantes, sorprendidos por mis palabras, su mano vagaba por mi rostro, estudiando cada parte de él, acaricie su dorso.

-No sé... pero ¿qué te parece si nos vemos más a menudo?, y vemos que pasa con estos sentimientos que nos están volviendo locos. Sonrió tras mis últimas palabras.

QHUINN

 Lo observo maravillado, tanto por sus palabras como por sus actos, sentir que nos besamos nuevamente ahora con un poco mas de premura y exigencia, las suaves caricias de nuestras lenguas. ¡¡¡Dios!!! Su sabor es delicioso, realmente es adictivo, puesto que solo me hace anhelar más de él. Sus brazos me instan a ponerme de pie mientras nos besamos, rodeo su cuello mientras el posesivamente, me abraza; nuestros cuerpos quedan muy juntos, calzamos a la perfección, como dos piezas prefabricadas hechas para estar unidas.

Algo dentro de mí se rompe, es como si mi anestesiado y acorazado corazón estuviese cobrando vida después de tanto tiempo, retumba de manera descontrolada en mi pecho hasta el punto de sentir que desea arrancarse de mi caja torácica. Suaves besos son brindamos. Acaricio tu rostro sin poder dar crédito a lo que me pasa... 

Tus palabras me llenan de una extraña calidez que me encanta y espanta a la vez. Desde que lo he conocido, mi protegido y resguardado mundo interior se ha revolucionado. Sonrío ante su propuesta 

- bien, acepto aquello. Necesito saber de ti y sobre todo tengo la necesidad imperiosa de que me conozcas. Seré completamente sincero contigo y me mostrare a ti tal cual soy. Sin caretas, solo yo. Como te he dicho, necesito que me conozcas y sobre todo necesito, ordenar la chorrera de cosas, sentimientos y emociones que me provoca estar contigo. Siéntete en la libertad de preguntar lo que desees, sin tapujos ni restricciones que a todo responderé - te brindo una malvada y divertida sonrisa de lado - te mostrare lo mejor y lo peor de mi. Debo aclarar que esta situación es una oportunidad que me estoy brindando, siento que eres.... No se... Distinto. Y tomare el riesgo, ya que por tu cara veo que te pasan cosas similares y estas tan confundido y maravillado como yo 

Sonrío y apego mi cuerpo al tuyo, deslizo suavemente mis labios por tu cuello en una suave y tierna caricia, inhalo la rica fragancia de tu piel mezclada con perfume, realmente embriagadora. Te doy un lento beso en la zona donde late furiosamente tu vena. Doy un paso atrás y te brindo una tierna sonrisa.

- ya que estamos aquí, te mostrare mi mundo. Esto es algo que nadie sabe, serás el primero. Esto - hago un gesto con la mano mostrando todo a mi alrededor - es el lugar donde arranco cuando quiero estar solo y desconectado de todo y de todos.

BLAY

 Respiro con dificultad, me duele los huevos de la necesidad de fallármelo ahí mismo. Su lengua lame mi cuello, siento su aliento que penetra mi piel y hace que arda en llamas. Me digo a mi mismo una y otra vez…

- calma Blay cálmate

Gracias que se separo de mí unos centímetros y pude respirar.

Muy complacido me enseño su lugar, explicándome el porqué de la pasión a este sitio tan inusual. Me hablaba extasiado, dándome cada detalle de las cruces, tumbas y panteones que ahí se encontraban; y sobre todo el porqué de ese apego al silencio.

-Me siento muy honrado de que me hallas enseñado tu sitio seguro, de vez en cuando todos buscamos algo de soledad - respiro profundo - Yo también tengo uno, aclaro mis pensamientos y debo de decirte que últimamente he ido mucho, precisamente estaba en él cuando he recibido tu mensaje - Sonreí ante su sorprendido rostro –

Lo mire complacido, pase mi dedo por el perfil de su nariz, bajando hasta su barbilla.

-Te sorprende ese dato Qhuinn, sabes nadie sabe qué hago eso, solo tú, pensarían que soy un solitario y no es así. Es difícil de explicar, pero me siento bien, a veces me desnudo y me meto en el agua en plena noche.

Deslice mi mano para coger un mechón de su cabello y colocarlo detrás de su oreja. Solo un contacto con su piel y erizaba el vello de mi cuerpo.

-¿Te gustaría hacer algo o ir algún sitio? esta anocheciendo.

QHUINN

Me sentía extrañamente cómodo hablándole de aquel sitio tan especial para mí, le explique con detalles las historias que conocía del lugar y de lo importante que es para mí, escuchó atento todo lo que le relataba.

De una pieza quedé cuando me confiesa que él también tiene un sitio especial dedicado a desaparecer del mundo... wow... pensé que era el único, claro no es tan excéntrico como al que yo voy, pero en el fondo tiene el mismo sentido, poder desconectarse de todo el mundo real y poder tener un momento de introspección y reflexión... un momento para uno mismo.

Una suave caricia de tu parte e inmediatamente deslizo mi mano a la parte de atrás de tu cuello y te doy un suave y tierno beso, solo el roce de nuestros labios, se siente tan natural, tan correcto. Tus manos se deslizan por la parte baja de mis caderas apegando tu cuerpo al mío.

- Me encantaría... vamos... sorpréndeme - Sonrío sobre tus labios -