sábado, 30 de agosto de 2014

Capítulo 1


QHUINN
Estaba realmente cabreado. Había tenido una fantástica salida al cerro con los chicos y al finalizar la jornada una puta y jodida reunión que me sacó de quicios… simplemente no comprendo a los adultos, imbéciles todos ellos… las luchas de poder y egos se ven en todas partes, eso está más que confirmado.

No tengo deseos de llegara a casa aún, necesito despejarme un rato, por lo que tomo otro camino y me voy directo al bar más próximo, al hacer ingreso me detengo en la entrada,  siento observado… ¿y cómo no, si ando de uniforme?

- A la mierda

Pienso para mi mismo mientras me voy directo a la barra y el suave tintineo de mí silbato metálico golpeando mi cortapluma marca mis pasos, me siento en el alto taburete y dejo caer mí empolvada mochila a los pies, pido un vodka tónica y espero.

Al instante una linda chica me trae mi trago y comienza a coquetearme… mmm… lo que faltaba. Recibo el trago y me giro para observar el ambiente en el local. No hay mucha gente, pero en un rincón apartado hay un grupo de bulliciosos que la pasan de lo lindo.

BLAY
Un sábado más. El pito del microondas me alerto de que mi cena estaba hecha. Me acerque sacando una lasaña precocinada, cogí una cerveza y me deslice hasta el salón. Apreté el botón del mando a distancia del televisor. Otra noche más de zapping. Me disponía a meterme el primer bocado de lasaña en la boca, cuando sonó el móvil. Mensaje.

SMS: Ey... macho esta noche nos vemos a las 12 en Karma... no faltes.


Con pereza coloque el móvil a mi lado. Salir no me apetecía, pero realmente para la mierda que se veía en el televisor, no estaría mal pasar un rato con los colegas.

SMS: "OK" – respondí –


Me di una ducha rápida, quizás debería haberme afeitado pero no quería entretenerme más de la cuenta, solo llevaba barba de dos días. Me vestí con un jeans ajustados, polo negro, botines semiabrochados, cinturón con hebilla en plata. Me enlace en mi muñeca un brazalete de cuero negro y un anillo de platino en mi dedo pulgar. Mire mi aspecto en el espejo, tratando de arreglar mi pelo desordenado. Nada que hacer. Por lo demás me encontraba cómodo. Agarre el casco de la moto y las llaves de casa, saliendo hacia el garaje.

Llegue a mi destino en quince minutos. La puerta del bar se encontraba plagada de gente. Malabarismo tuve que hacer para poder entrar sin empujes. Una vez dentro mire a mi alrededor, divisando donde se encontraban mis colegas. Uno de ellos entre la multitud levanto una mano indicándome donde se encontraban. Me deslice hacia ellos. Un saludo de nudillos fue nuestro saludo.

-Blay, mira cuantas tías buenas tenemos por aquí... será una noche de caza.


Me hablo con voz alta ya que el ruido de la música nos impedía oírnos.

-Bueno ya veremos... le hable en el oído... Nos colocamos en un lado de la extensa barra, en segundos tenía en mano un cubata de ron. Observe un poco más el lugar, la gente bailaba, reía... en fin, buen ambiente. Tiraron de mi camiseta.

-Oye macho como que ya veremos... de la peña eres el único que siempre mojas cabrón... me volvió a decir mi amigo. Sonreí con picardía ya que si quería follaba eso de seguro.


QHUINN
Paso mis manos por mi cabello y apoyando mi codo en la barra comienzo a enrollar un mechón en mi dedo distraídamente mientras bebo mi vodka y le sigo dando vueltas a lo pasado, la chica sigue dándome la lata mientras se contornea frente a mi… como si fuese a lograr algo, aún así le contesto cortésmente y con monosílabos todas sus preguntas, después de un rato se fastidia y aborta la idea de seguir cortejándome… 

Sin embargo mi tranquilidad se ve amenazada cuando un par de borrachos comienzan a lanzar burlas e insultos hacia mí, debido a que estoy de uniforme… para mí es un orgullo y es parte de lo que soy, no me gusta ocultarlo, hago oídos sordos y sigo en lo mío, pero la cosa se vuelve de castaño a castaño oscuro cuando un fuerte empujón me llega desde la espalda el cual casi me hace botar el vaso hacia el piso, cuento internamente hasta diez para no volver esto más grande… lo que menos quiero el día de hoy es estar metido en un lío, ya suficiente tuve por hoy. Cogiendo mi mochila saco el dinero suficiente y pago el trago, me dispongo a retirarme, sin embargo… ese parcito no opinan igual y otro empujón me lleva directo a chocar con la barra

-no quiero espectáculos, sólo déjame ir, no busco pelea


Lentamente me saco el pañolín y el silbato de mi cuello y los mantengo sujetos en mi puño


BLAY
Desde donde me encontraba, con el trajín de gente y el ruido de la música. Divise unos tíos acechando a un hombre. ¡¡¡Jodido infierno!!! Siempre tiene que haber esos típicos que van de chulos por la vida. Unos mete mierda como le llamábamos nosotros. Deje mi cubata en el filo de la barra, mis pies se encaminaron hacia donde se estaba abriendo esa reyerta. La gente seguía bailando y riendo sin hacer caso a la situación.

Me acerco apartando a la gente, trato de acercarme a uno de esos gilipollas para calmar el ambiente. Y lo que veo me deja parado en el sitio. Levantas la mirada que tenías clavada en el suelo. Tus ojos bicolor se quedan atados a los míos. Jesús.....mariposas o calambres se adueñaron de mi estomago... ¿Qué pasaba seria verdad que existía el flechazo? no... no... de seguro que no...


Me acerque hasta ti, estabas en disposición de ataque y seguro que una buena paliza le habrías dado. Baje mi mirada, tu cuerpo fuerte, se notaba tras el uniforme que llevabas. Los hombres que te acechaban al vernos, sin decir nada más se marcharon. Dejándonos solos.


-¿Estas bien? - Te pregunte.


QHUINN
-Jodido infierno...

Pienso al verle a los ojos, me pierdo en ellos, es como si el mundo se hubiese detenido, como si todo a mí alrededor dejara de existir... ladeo mi cabeza y te acercas a mí,  me golpeo mentalmente dos veces para volver a la realidad, vuelvo a colocar mi pañolín y silbato al cuello.

- Si, todo bien. Sólo eran un par de jodidos ociosos en busca de líos y hoy lo que menos deseo son embrollos - Acomodo mi vieja mochila al hombro – por cierto soy Qhuinn

- Blay

Estiro mi mano a modo de saludo y cuando hacemos contacto una corriente de electricidad me recorre mi cuerpo, por la expresión en tu rostro al parecer te ocurrió lo mismo, nos quedamos mirando tomados de la mano un poco más de la cuenta, tus mejillas se colorean con el color de la vergüenza y reímos tontamente desviando la mirada.

- ammmm… la verdad es que ahora me estaba por marchar

BLAY
 Me recorrió, pura y dura energía con su contacto. Note como mis mejillas se sonrojaban. Una cosa muy extraña. Sin soltar las manos todavía cruzadas me sonrió diciendo que se iba.

- Te gustaría tomarte una copa conmigo....


Me acerque a su oído ya que no se oía casi nada. El asintió con la cabeza.

Me aproxime a la barra, llamando con el dedo a la camarera. Ella muy sonriente y coqueta se acerco quizás más de lo debido. Me volví para mirarle y con un gesto de mi mano le dije que tomaría. Tras varios intentos se acerco a mi costado inclinándose para hablar con la chica. No se impuso separarse de donde estaba, hasta que llegaron las bebidas. La cosa estaba chunga, ya que mi miembro crecía y crecía de una manera irracional. ¿Pero que me pasaba con este desconocido? Apenas se podía hablar y le indique de irnos a una esquina del pub. Yo iba delante y el detrás, con su gran mochila colgando de un hombro.


QHUINN
Camino detrás de Blay y enarco una ceja mientras contemplo de arriba a bajo su fibroso cuerpo... nada de mal... me digo a mi mismo mientras me guía a un rincón apartado y oscuro del bar, dejo caer mi mochila a mis pies mientras me siento a tu lado, desde este lugar se puede tener una buena vista de todo el local, aunque con lo oscuro que está, lo más probable es que sólo se divisen las siluetas de ambos. Cojo mi vodka tónica y doy un buen trago mientras busco en las profundidades de mi mochila mis cigarrillos, saco mi fiel encendedor zippo y sigo buscando, mi piel se eriza al sentir tu profunda voz en mi oído 

- ¿gustas?


- vale, gracias


Saco uno de los cigarros que me ofreces encendiéndolo con una buena calada. Me acerco a ti y te hablo en el oído


- no te he dado las gracias por la ayuda con esos tipos, la verdad es que no tenía ganas de pelea, pero si me tocaban de nuevo... no respondía. Aunque estoy acostumbrado a que se mofen por lo que hago, la verdad es que poco me importa lo que digan, pero ellos se estaban pasando de la raya.


BLAY
¡Jesús! su voz era una melodía en mi oído. No sé por qué razón lo hice, pero metí mi mano en su pelo y lo acerque más a mí.

-No hay de que… esa clase de personas solo buscan que les partan la cara... ¿por qué se mofan de ti? no veo nada raro.


Mis palabras se quedan en su mejilla. Suelto mi mano, dejándolo que vuelva a su sitio, distraídamente agarro mi copa y le doy un buen sorbo. Uno de mis amigos se acerca al lugar donde estoy.

-¡Ey! macho… ¿no vienes?... tengo dos tías preparadas para lo que queramos -rio a carcajadas-


-No... Ve tu… estoy con un amigo conversando -le dije con calma-


Qhuinn, ladeaba la cabeza de un lado a otro. Dándome a conocer cada pulgada de su rostro.


-Si tienes que irte… no hay problema –sugirió-


-Tranquilo… Q... se lo que tengo que hacer... diciendo esto el volvió su mirada hacia la mía. Ahí nos quedamos mirándonos, segundos, minutos...


QHUINN
 ¡Jesucristo! el roce de sus labios en mi mejilla, su aliento calentando mi piel, su mano enterrada en mi cabello, me puso a mil, y algo entre mis piernas cobro vida propia y es una jodida tortura debido a los apretados black jeans que llevo puestos... demasiado pronto te alejas y continúo fumando, mientras conversas con alguien.... al parecer con tus amigos venías por mujeres... hétero... jodida y puta mala suerte la mía... malinterprete las... señales. ¡¡Jodido infierno!!

Aún así despachas a tu amigo... y prefieres quedarte conmigo. Al mirarte, quedo clavado mirando tus ojos, son totalmente hipnóticos e invitadores, no sé cuánto tiempo pasó realmente, pero fue como si durante ese período todo lo demás dejó de existir. Pestañeo para salir del encantamiento y sonrió divertido por lo ocurrido, no debo mal interpretar las cosas o será jodidamente vergonzoso. Me acerco a ti para hablar


-como te dije, existen personas cerradas de mente que disfrutan de mofarse de uno, no logran comprender que personas de mi edad estemos jugando y cantando por la vida, que usemos nuestras únicas vacaciones para salir a acampar a cargo de niños o que en nuestros fines de semana nos matemos haciendo actividades... en ocasiones somos... incomprendidos


Mientras hablo, procuro rozar ocasionalmente mis labios en tu oído y mi mano se va a tu espalda para acercarme un poco más


BLAY
Mientras me habla su aliento pasa como una corriente eléctrica por mi cuerpo. Desembocando en mi pene, que a estas alturas se encontraba en una situación muy embarazosa. Estaba tan sumamente empalmado que no me corría la sangre por ella. Acaricie distraído su muslo, mientras seguíamos hablando, subía y bajaba palpando la loneta de su pantalón. Acerque mi mano a su mejilla, aproximando su boca a la mía. No sé el porqué, pero bese sus labios, fue un impulso o simplemente deseo...

Cuando levante mi vista hacia él, me miraba embelesando su sonrisa que aprobaba mi audacia.


-Perdona... yo... fue... - no pude seguir –


Simplemente me levante del rincón donde nos encontrábamos, aprese tu mano izándote conmigo, no hable nada, ni pensé en nada solo actuó el deseo imperioso.

Nos adentramos a los aseos, busque un vitáculo  vació. ¡¡Bingo!!.Te empuje hacia los adentros, un sitio bastante pequeño, solo el inodoro como obstáculo.

-Tengo que follarte....


QHUINN
Sentir tus suaves labios en los míos simplemente fue la gloria, el beso fue sólo una simple caricia con nuestros labios, suficiente para sentir  mi corazón vivo, como hacía mucho tiempo no lo hacía, sus disculpas no quedaron en nada, su voz se fue apagando cuando sus ojos se calvaron en mi embelesada sonrisa.

Rápidamente tomo mi mano entrecruzando nuestros dedos y nos dirigimos a los servicios higiénicos.

Sonrío al saber tus intenciones, dejo caer mi mochila al suelo y coloco mis manos por la parte baja de tus caderas apegando mi cuerpo al tuyo para frotarme descaradamente y a gusto en tu erecta verga. Capturas mis labios en un profundo y apasionado beso, gimo de placer al sentir tu lengua penetrar mi boca, la punta de esta juguetea con mi pircing. Comienzo a jalar tu polo negro para sentir la piel de tu espalda, deslizando y apretando las yemas de mis dedos en ella desde arriba hacia abajo, recorro la pretina de tu pantalón, donde lo desabrocho y jalo hacia abajo junto con tus bóxers, una erecta verga orgullosa y dura me da la bienvenida, con un suave empujón te dirijo hacia el muro y sonrío con malicia mientras capturo tu pene en mi mano y te acaricio lentamente.

- quiero probarte –

Bajo por tu cuerpo directo hacia el sur

BLAY
Una situación verdaderamente sexy. Su cabeza baja por mi cuerpo, tocando y acariciando, hasta quedar de rodillas frente a mi verga. Me apoyo en la pared del aseo, dejando que mis manos sujeten su pelo. Bajo la mirada en el momento exacto que el mete mi polla en su boca. En un acto de reflejo la empujo, quedando parte de ella en su profunda boca. El puño de mi mano controla sus embestidas, primero lento para seguir más rápido. Jodido infierno... estaba por correrme la mejor mamada de mi vida. 

Lo aparte empujándolo de los hombros, le di la vuelta, apoyando sus manos en la descuidada pared. Tire de sus pantalones posicionándome detrás de él.

-Eres jodidamente sexy


Gemí en su oído. Alzó sus caderas, mi mano agarro su pene. Se sentía suave y algo mojado, sonreí, el estaba como yo excitado, sus primeras gotas de semen bajaban por su erección. Excitante.

QHUINN
 Siento su mano agarrando mi verga e inmediatamente bajo la mía para ayudarlo en mi masturbación, gimo de placer al sentir como me toca con firmeza pero lentamente. Aprovecha el momento en que mis labios se separan para introducir un par de sus dedos en mi boca, los cuales succiono y lamo a gusto, ya puedo imaginar tu propósito. Después de dejarlos bien empapados de saliva los llevas a mi trasero y buscas mi entrada, la cual acaricias y preparas para tu penetración, primero introduciendo uno de tus dedos, luego dos. Pero el deseo y las ganas de posesión son fuertes para ambos, así que sacas tus dedos de mi y tomándote a ti mismo te colocas en mi entrada y con una fuerte estocada ingresas por completo, gimo en sorpresa y te mantienes quieto.

- ¿estas… bien?


Susurras en mi oído, a lo cual sólo puedo asentir y para confirmarlo me deslizo hacia adelante y retrocedo fuerte empalándome en ti. Solo bastó eso para que afirmaras mis caderas con ambas manos y comenzaras a follarme de manera salvaje y descontrolada. Levanto mi mano para enterrarla en tu cabello, giro mi rostro y capturo tus labios, lugar en donde ambos ahogamos nuestros jadeos y gemidos en un apasionado beso.


Sentir como sales y entras llenándome por completo es la gloria, hacía mucho tiempo que no me sentía tan completo… jodidamente extraño, sin embargo en el fondo de mi mente se comienza a formar el sentimiento de que esto es correcto, que esto es lo que debe ser.


- Córrete


BLAY
 Mis caderas se movían, dentro, fuera. Estaba sobreexcitado, el respondía a todos mis sentidos. Dándome un placer extremo. Gemíamos y hasta gritábamos algo sublime. Hasta que un ruido de pasos y varios golpes en la puerta, me hizo parar en seco, tape su boca con la mano ya que seguía, emitiendo pequeños jadeos.

-¡¿Hay alguien?! -  rugió una desagradable voz


-¡¡Está ocupado cojones!! - grite.


Mi mano seguía tapando la suya, pero ya no me mantuve parado, seguí el curso de mis instintos y el morbo de saber que había gente en el servicio, me causo gran excitación. Mordiste mi mano, metiéndote un par de dedos en tu boca, chupabas y lamias. 

Afiance mi agarre en tu verga, dispuesto a que eyaculáramos los dos a la vez. Y así paso. Rugí con los espasmos de mi orgasmo al igual que el. Gotas de sudor brotaban de mi cabeza, atrape tu cara en mi mano besándote con pasión, mi lengua ahondaba en la tuya, buscando el pequeño botón que llevabas. Caímos apoyados sobre la pared. Agotados, pero totalmente saciados. Mi cuerpo envolvió el tuyo ahora más calmado los estremecimientos se iban apaciguando.


-Quiero que vengas a mi casa – susurras a mi oído –


QHUINN
‎- Eso me encantaría, pero… 

Apegas tu cuerpo al mío y capturas mi boca en un apasionado beso, siento como suavemente comienzas a salir de mí, quedándome una extraña sensación de vacío. Me giro para quedar frente a ti, deslizo mis manos a la parte baja de tus caderas para acariciar tus prietas nalgas y vuelvo a retomar nuestro beso, expresando necesidad, deseo y lujuria, mi lengua explora tu boca, entrando y saliendo como si fuese un coito, acariciando tu lengua con la mía, jugando con mi pircing. Frotando descaradamente mi cadera en la tuya


Poco a poco mi respiración se va regulando, la corrida que tuve fue magistral, al mirarte a los ojos, puedo distinguir en la gama de grises, tus ojos están oscuros de deseo, de hecho, tus avariciosas manos aún recorren mi cuerpo, tu boca no se ha despegado de mi piel, dándome suaves besos, lamidas y mordidas en mi cuello. Cierro mis ojos y disfruto de tus atenciones


-De verdad no puedo irme contigo Blay, no vivo cerca de este lugar... todo lo contrario, ni siquiera soy del barrio… pero si estás de acuerdo en que nos encontremos otro día, eso me haría muy feliz


BLAY
Tenía gula por su fantástico cuerpo. Impresionante la follada que había tenido. No podía dejar de tocarle. Seguí acariciándolo y besándolo. El no vendría a casa, oí esas palabras distraídas que salían de sus labios.

- Si... claro, nos veremos otro día, te daré mi número de móvil y nos llamamos.


Le hable bajito. Sus ojos bicolor, me miraron con tristeza, como si eso no fuera lo que deseaba oír.

-Eee… si si te lo daré...


Me hablaba colocándose la ropa de una manera despreocupa. Lo mismo hice yo, ya que me encontraba con menos ropa que el.

Salimos del aseo, medianamente normales. Pensé que se vendría a casa, la verdad, deseaba a este hombre de una manera irracional, no común en mí. Lo deseaba. La música alta nos indico donde nos encontramos al abrir la puerta que comunicaba con el Pub... Me olvide del sitio donde me encontraba.

El seguía mis pasos, cabizbajo, mirando el suelo. Lo mire ante el tumulto de gente.


-Deseas tomarte otra copa Q - negó con la cabeza –

-Yo me voy a casa


- ¿quieres que te acerque alguna parte?

Grite, el ruido era bestial, lo agarre del brazo llevándomelo, hasta coger el casco que lo tenía en la barra. 

Ya en el exterior del recinto, pude mirarlo de arriba a abajo. 

-yo… ha estado bien Qhuinn, he disfrutado...


Acaricie su mejilla. Me deslice hasta la moto colocándome el casco. El se quedo ahí parado con su inmersa mochila. Sin decir nada. Arranque, puse primera para salir. En ese momento el se coloco delante de mí.

QHUINN
En un acto totalmente impulsivo me paro frente a la moto que estaba a punto de arrancar, el porqué de mi actuar es un completo misterio, nunca me había sucedido… solo sé que no debo dejarlo marchar solo, no es mi costumbre irme con alguien que acabo de conocer a su casa, lo habitual es irme a un motel, pero bueno, quien no se arriesga…

- Cambie de opinión, me voy contigo… no me preguntes el porqué, esto no es habitual en mi… solo sé que debo hacerlo y por regla general confío en mi instinto.

Con un gesto me invitas a montar en  tu moto, me subo y apego mi cuerpo al tuyo envolviéndote con mis brazos, rodeando tus caderas y un poco más abajo mis manos descansan distraídamente. Nos vamos como alma que se la lleva el diablo por las solitarias y oscuras calles.

Después de un rato, llegamos a su casa, bajo de la moto y espero. Lo sigo atentamente con la mirada, sus movimientos son ágiles y elegantes… muy masculinos, estaciona la moto y me invita a ingresar a su casa.

El lugar es muy cómodo y sobrio, un par de perros salen a su encuentro haciendo una gran fiesta, dejo mi mochila en un rincón. El lugar está ordenado… meticulosamente ordenado, quedo prendado en un mueble que luce orgulloso una pila de libros y CDs de música, repaso los títulos.

- ¿deseas un trago Q?

- Claro, el vodka es lo mío… de lo contrario sólo cerveza.

Mientras leo, siento la mirada de alguien, al buscar de quien, veo que están ambos perros mirándome, sólo uno se me acerca y me agacho para acariciarlo

- hola pequeño


Comienzo a acariciarlo y a los segundos ya estoy sentado en el suelo jugando con él, no me doy cuenta que Blay se acerca y me ofrece una fría y sudada cerveza, poniéndome de pie la acepto y le doy unos buenos tragos, dejando la botella sobre la mesa me acerco a él

- necesito esto con urgencia

Capturo su boca en un apasionado y muy necesitado beso. Ambos comenzamos a retirar lo más rápido que podemos toda nuestra ropa.

BLAY
 Estoy jodidamente sorprendido, esto no es habitual en mi, por mas que lo pienso, me parece extraño la atracción que siento por esta hombre. Me dirijo a la nevera, sacando dos birras bien frías. Apoyo mi frente en el panel, pensando en todo lo que he hecho en las últimas horas. Paso, no quiero pensar.

Me deslizo al salón, viéndolo como juega con uno de mis fieles perros. Le ofrezco la cerveza. Se levanta del suelo directo hacia mí.


Capturando mis labios, correspondí a cada uno de ellos. Nuestras manos viajaban por todo nuestros cuerpos, lanzando ropa por todas partes. Una vena salvaje se impuso. Una vez desnudos, piel con piel. Lo arrastre hasta mi habitación. Una cama enorme nos esperaba, Lo lance en ella, su espalda tocaba las sabanas blancas. Gatee por ella hasta quedar entre sus piernas. Saque la punta de mi lengua lamiendo parte de su miembro, subiendo por su ombligo… pecho, hasta quedar en sus labios.


-Sabes me gustas mucho.....susurre en sus labios antes de atraparlos… quiero follarte toda la noche... estoy desesperado por hacerlo.


QHUINN
‎- la noche es joven... se que lo harás 

Nos revolcamos en la cama en una maraña de besos, caricias, mordidas, lamidas; todo como a manera de reconocernos por completo, tu cuerpo es delicioso, el aroma de tu piel es embriagador, hace que mi cabeza deje de pensar racionalmente y solo me dejo llevar por lo que siento en el momento, puro deseo y necesidad de posesión, un sentimiento bastante básico y salvaje. Te volteo de vientre sobre la cama y elevo tus caderas para que tu culo quede a mi disposición, separo tus piernas con mis rodillas y comienzo a lamer y morder desde tu cuello bajando por el sendero que marca tu columna, mientras mis manos se van a tu muy erecta verga, masturbándote primero de manera lenta para luego aumentar el ritmo y volver a reducir la velocidad, te escucho gemir y gruñir en frustración, sonrío satisfecho. Con ayuda de mis manos separo tus nalgas y comienzo a estimular y lubricar tu entrada deslizando mi lengua, una y otra vez, estas ardiendo bajo mi toque y logro visualizar como la piel de tu espalda comienza a perlarse con gotas de sudor. Simplemente ya no aguanto más.


Colocándome de rodillas, me tomo a mi mismo y entro en ti con una fuerte estocada, penetrándote hasta el fondo, la sensación de sentirme dentro de ti, rodeado por tu cuerpo que se acomoda a mi dándome la bienvenida es simplemente maravillosa... una vocecesita en el fondo de mi cabeza comienza a tomar poco a poco fuerza... "Mío" comienza a susurrar. Poniendo mis manos en tus caderas te comienzo a follar fuerte y duro.


BLAY
 Mil sensaciones recorren mi cuerpo. Leves toques de electricidad me iluminan. Mis manos agarran las sabanas blancas, apretándolas con mis puños. Una manera de no salir despedido de la cama ya que sus embates son duros. Mis caderas se mueven a su son lentos para luego profundizar con más rapidez. Siento como me abre, sus constantes bombardeos me están llevando un orgasmo seguro. Agarro en un puño mi pene, recto y firme lo masajeo, de arriba a abajo y en círculos. Aprieto más fuerte, ya que noto como se aproxima mi orgasmo. Sigo el mismo ritmo que el bailando a su son.

Me corro a gran velocidad, al mismo tiempo que él, ya que me sujeta las caderas con fuerza hincándome los dedos en la piel. Gemimos y jadeamos sin control. Mi espalda se arquea alzando mi trasero, acomodando su explosiva corrida...

-Joder....suelto con las pocas fuerzas que me quedan. Sale lento de mi acomodándose a mi lado, Mi cuerpo se queda estacionado de la misma forma, respirando pausado, adaptándome a su ausencia.


QHUINN
Agitado aún me recuesto a tu lado, después de un momento te acomodas a mi lado, embelesado acaricio tu cara y te miro fijamente, cada uno de tus rasgos, delineo tus cejas y deslizo las yemas de mis dedos por tu mejilla, eres hermoso.

Apego mi cuerpo al tuyo y siento tu caliente cuerpo, me acurruco a tu lado y me abrazo a ti, comienzo a besar tus labios lento, muy lento, sin profundizar, sólo una desgarradora tierna caricia, suaves toques de nuestros labios.


Se siente tan malditamente bien estar al lado de este hombre, no se nada, absolutamente nada de él, sin embargo la sensación de cercanía es profunda. 

Siento como tus manos sobre mi cuerpo, comienzas a acariciar lentamente, como si delinearas cada parte de mi, juegas con las argollas de mis pezones y al parecer te ha llamado la atención el piercing en mi glande


- eres pelirrojo ¿verdad? y tus ojos son azules


BLAY
Una ligera sonrisa se arrincona en mi rostro. ¿Pelirrojo? lo que destacaba de mi era el pelo rojo y mis ojos azules.

-Si lo que comúnmente llaman pelirrojo. Sonrió. -Y a ti te gusta el rollo duro, por lo que veo tienes argollas en sitios muy íntimos. Digo esto acariciando el pirceng de su glande. 


Tenia el cuerpo bien formado, delinee cada parte de él. Jugaba con las yemas de mis dedos con lentitud, grabando cada parte de él. Me ladee quedando de cara a el, mi pierna callo despreocupada por su cadera.


-Me gustas... ¿crees en los flechazos Qhuinn? -pregunte curioso-


QHUINN
Con mi nariz acaricio tu mejilla y mis labios rozan los tuyos

- Si me hubiesen preguntado eso hace 8 horas atrás, mi respuesta hubiese sido que es una total estupidez, que eso es solo para las novelas y series televisivas, para mujeres que se deslumbran o para el supuesto primer amor de adolescente que al final lo que tienen es solo una revolución de hormonas que le piden a gritos follarse a lo primero que se mueva... sin embargo, algo me pasa... no lo se explicar, pero siento como si te conociera de antes... no se que decir, ni yo me entiendo, he actuado como nunca lo hago...


Callas mis palabras con un suave beso, deslizo mi mano hacia tu nuca y te acaricio lentamente, apego mi cuerpo al tuyo.


- me gustas y mucho


BLAY
Sus caricias, me entibiecen de una manera hipnótica. Me gusta su piel, por ello no paro de tocarlo, me gusta el sabor de sus labios y me gusta sobre todas las cosas, la manera como hemos follado, brutal y sobretodo excitante.

-Quizás… podríamos vernos de vez en cuando, en verdad me gustaría verte. Esto que me ha pasado es inusual en mí... Hable con mis labios pegados a los suyos. Mientras que mis manos devoraban su cuerpo, aparcando mis dedos en su pene, que había vuelto a endurecerse.


Quédate la noche conmigo… mañana te llevare donde tú quieras… dude de mis palabras. Era una sensación demasiado fuerte, para ser la primera vez que lo vi. Pero ante todo, me gustaba y sabia que esta sería la primera de muchas noches...


No hay comentarios:

Publicar un comentario